Después de la deriva a Sigüenza, donde nos introducimos de lleno en el cuento de Blancanieves disfrazándonos de Madrastra o de la propia Blancanieves he podido darme cuenta de varias cosas...
Hay veces en la vida en las que sentimos miedo o temor por alguna situación o cosa y que solo pensamos en eso, aunque no lo creamos puede que cuando ya dejamos de tener ese miedo o lo olvidamos es cuando realmente estamos en peligro, es decir, cuando menos te lo esperas aparece tu peor pesadilla. Eso mismo me ocurrió con mi madrastra, cuando en ese momento quise hacerme una foto en la que iba a poner "cuando la bruja no me encuentra" apareció de la nada mi bruja, justo en el momento en el que me había parado para tomar dicha foto.
Otra de las cosas que pude reflexionar durante ese día es que a veces nosotros nos metemos en la boca del lobo, bueno en este caso en la de la bruja, ya que fui yo quien casi encontré a mi bruja porque me paré justo enfrente de donde ella se encontraba.
También puede comprobar esa angustia de sentirse perseguido y con miedo y sobre todo esa necesidad de querer huir para que tu pesadilla en este caso la bruja no te cogiera. Y eso es lo que a lo largo de nuestra vida puede ocurrirnos, a veces nos sentimos con tanto miedo que lo único que necesitamos es huir, desaparecer para que ese miedo no nos persiga.
Creo que ha sido una buena manera de poder recapacitar y reflexionar y ver todo lo que un simple cuento, que desde pequeños nos están contando, puede esconder.
No hay comentarios:
Publicar un comentario