Esta mañana, he tenido un sueño
sobre la clase de Plástica que íbamos a tener esa misma tarde. Nuestra profesora
Pilar nos había dicho en estos días de traer un pañuelo, cosas para dibujar y
música para escuchar con nuestros auriculares mientras hacíamos la actividad.
Antes de saber lo que íbamos a hacer concretamente en ese día, mi subconsciente
ya imaginó en forma de sueño lo que iba a ocurrir esa tarde.
Mi sueño, o lo que recuerdo de
él, comenzaba antes de entrar a clase. Íbamos hacia clase una compañera y yo
cuando nos cuentan una noticia que había salido en el periódico. Unos periodistas
se habían enterado de que íbamos a hacer una actividad que consistía en ponerte
un pañuelo para taparnos los ojos, nos poníamos nuestra música y empezábamos a
dibujar lo que nos transmitiese la canción en un folio en blanco, hasta ahí
todo está bien y parece una clase normal de expresión artística. Lo alarmante
es cuando la noticia también decía que mi profesora ya lo había hecho en otras
ocasiones, ella quería seguir los pasos de un psicópata quien había quemado con
cigarrillos a sus alumnos en el cuello y otras zonas del rostro. Por lo tanto,
mi compañera y yo no acudimos a clase por lo que nos pudiese pasar. Y ya
desperté del sueño.
Obviamente, esto no ha ocurrido,
ni ocurrirá y por supuesto, mi profesora no es una psicópata. Me parecía
interesante contar mi sueño, o más bien pesadilla, ya que es un tanto llamativa
por la poca veracidad y la locura que conlleva que ocurra eso.
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